lunes, 29 de febrero de 2016

El Comienzo (Parte 1)

¡Hola!, me llamo Cristina y soy una de las 500 becadas por la fundación de Amancio Ortega pero empecemos por el principio...
Jueves...
Tras un largo día de instituto por fin a casa como un día cualquiera en el que llegó a casa a comer. Una vez sentada me dice mi madre que en Facebook le ha salido algo de una beca para estudiar en Estados Unidos o Canadá un año, 1 de Bachiller (pues oye a lo mejor no es un día cualquiera). Nada más comer cojo mi pórtatil y busco información sobre esa beca, averigué de qué iba, cuando acababa el plazo de inscripción (quedaba una semana) , y los requisitos:
- Cursar 4ª ESO en ese momento en un instituto español.
- Tener un 7 o más de media (no se cuenta religión) y más de un 8 en inglés, todo en 3ºESO.
- No haber estudiado antes en el extranjero.
- El pasaporte era opcional, en mi caso me lo creé a los meses ya que nunca he salido de España.
Cumplía todos los requisitos y de siempre había estado obsesionada con todo el tema del inglés y viajar, así que ¿por qué no?, me metí en las hojas de inscripción y tenía que rellenar prácticamente mi vida en unos cuantos formularios. Si lo recuerdo bien eran sobre mis datos personales y familiares, sobre mi vida escolar y algunas preguntas personales. Pero lo más importante de todo era que en ese momento tenía que decidir si irme a Canadá o a Estados Unidos. Pensé con mis padres los pros y contras de cada sitio, mi padre no me decía nada pero sabía que prefería Estados Unidos y mi madre me dijo que veía mejor Canadá por una serie de motivos pero que no decidiera por lo que ella me decía si no por lo que yo quisiera, y a mí la verdad me gustaba más Estados Unidos, así que eso escogí.
Una vez elegido un camino tenía que decidir que fecha iría hacer el examen escrito (la primera fase de eliminación), tenía que ser sábado porque mi padre trabaja, así que opté por el 21 de noviembre en Málaga, mi zona más cercana.

Sábado 21 de noviembre...
Me desperté temprano ya que a las doce empezaba el examen y yo soy de un pueblo de Jaén, por lo que me esperaba un viajecito de unas 2 horas y media.
Llegamos con hora de sobra como para ir a un Starbucks cercano al NH Málaga (hotel donde hice el examen) y desayunar. Al entrar al hotel estaba llenísimo de gente, los padres tuvieron que esperar como en una especie de pasillo y a nosotros nos llevaron a un patio a esperar que los chicos del turno anterior terminaran el examen, entré de las primeras, me senté en un banco y una chica que quería ir a Canadá se sentó a mi lado y empezamos a hablar, luego se sentaron otras dos de Granada que también querían ir a Canadá (no sé nada de ellas solo la chica primera que no pasó el oral).
Cuando nos llamaron para entrar estaba temblando, el examen eran 3 partes:
- Listening: La primera parte se me dio genial, pero había unas que te ponían como si estuvieras en una clase real y buah fatal.
- Reading: Era facilísimo, me acuerdo de uno de una gráfica sobre comida que me hizo risa y todo.
- Writing: No había una respuesta correcta, las preguntas eran para conocer tu carácter (creo) y realizar un texto.
Cuando lo acabé no estaba feliz a pesar de que el reading y el writing me salieron bien, me quedé con el listening que me había salido peor he aquí mi negatividad .
Al llegar a mi casa busqué en twitter de todas las maneras posibles a ver si podía encontrar a alguien a parte de Alba, una de mis mejores amigas, que hubiera hecho el examen, y encontré un grupo en el que conocí a muchas chicas geniales entre las que están Emma, Bea y Paula.
Sólo tenía que esperar las listas de seleccionados (elegidos por el examen, nota media de 3 y IRPF de 2014)

El día llegó...
Las listas salían a partir de las 1 y a esa hora yo debería estar en el instituto, pero convencí a mi madre para que me sacara antes y mirarlas tranquilamente. A esa hora yo ya estaba sentada en el sofá, con mi padre a mi izquierda y mi madre a la derecha mi hermano estaba en la universidad, llegaron las una y media y todavía nada, yo ya desesperada actualizando la página cada segundo, hasta que sobre las dos salieron y busqué lo más rápido que pude la letra R, y cuando vi mi nombre juro que no me lo creía, mi madre y mi padre se tiraron a abrazarme, diciéndome que estaban muy orgullosos, Alba había pasado también, al igual que Emma y Paula pero por desgracia Bea no pasó y sentí una tristeza gigantesca y alegría por mí a la vez.
Ya estaba hecho, solo quedaba el examen oral y nos iríamos las cuatro a Estados Unidos.

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